Las autoridades sanitarias insisten cada vez con más fuerza en la importancia que tiene hacer ejercicio físico moderado con frecuencia. No sólo porque ayude a combatir el sobrepeso, sino también porque es bueno para la salud en su conjunto.
Si queremos estar sanos, ¿cuál es el mínimo de ejercicio físico que debemos hacer a la semana? ¿Y en qué intensidad? Es una pregunta que ha preocupado durante mucho tiempo a los especialistas y a la que se ha llegado a un cierto consenso.

Un mínimo de ejercicio

Según las recomendaciones actuales, apoyadas tanto por EEUU como por la UE, un adulto sano debe hacer a la semana al menos 150 minutos de ejercicio de intensidad moderada, esto es, como poco, caminar rápido o andar en bicicleta. Los expertos recomiendan, además, dividir este tiempo en 30 minutos, cinco días a la semana. Explican que las personas que realizan 30 minutos al día de ejercicio tienen una protección frente a las enfermedades no trasmisibles un 30% mayor que quienes no lo realizan. La cifra aumenta si, en vez de andar, se realiza un entrenamiento pautado. Las personas que hacen ejercicio físico planificado elevan esta protección al 50%.

Hacer ejercicio mejora además nuestro sistema inmunológico

Esto se debe a que cuando una persona realiza ejercicio, en todo el organismo se generan cambios. Algunas células que se encargan de la defensa del cuerpo comienzan a circular más rápido, lo que significa que pueden atacar a las bacterias y virus con más rapidez. Esto ocurre mientras el cuerpo está en actividad, pero el impulso que se les da a las células es a largo plazo y las defensas mejoran considerablemente. Lo que se debe hacer es hacer actividad física constante y manteniendo el ritmo a través del tiempo.

¡Sólo 30 minutos por día y mejoraremos nuestra salud!