Llegan días más fríos y sobre todo noches gélidas, en algunas poblaciones de nuestro territorio. En el dormitorio nada que no pueda solucionar una buena calefacción, una acertada selección textil para vestir la cama y, para dar una dosis extra de calor a la habitación, una preciosa chimenea que te permita gozar de la hipnotizante visión del movimiento del fuego.
Disfrutar de una chimenea en el dormitorio es un lujo a tu alcance, ¡no esperes a gozarlo solo unos días en un hotel!
La primera decisión a tomar es si deseas que el modelo sea abierto o cerrado, siendo la opción más habitual encontrar estos elementos cerrados, por seguridad.
También deberás decidir qué tipo de combustible quieres que emplee tu chimenea o estufa. Estas son las opciones:
Las chimeneas se suelen ubicar en los salones de las casas porque son la estancia con mayores dimensiones. Ten en cuenta que el tamaño de la chimenea en el dormitorio tendrá que ir en proporción con los metros disponibles. Solo en una habitación de generosas dimensiones coloca una chimenea como la que vemos, en esquina, de lo contrario es mejor que tenga solo un frente, para no abigarrar el espacio.
Otra decisión importante antes de instalar una chimenea en el dormitorio es si prefieres que vaya a los pies de la cama o en un lateral. La forma y la distribución de la estancia pueden ser fundamentales en esta elección, pues si el espacio es ancho puede ser perfecto situarla en el lateral creando un agradable rincón de lectura, como hace aquí Erico Navazo.
Tampoco descartes que la chimenea actúe como un elemento separador entre el dormitorio y el ambiente al que se halle abierto, como el vestidor o, de nuevo, un rincón de lectura. Será una forma muy cautivadora de dividir y, de paso, podrás aprovechar la visión de las chimeneas desde los dos ambientes, decidiéndote por un modelo de chimenea de doble cara.
Esta es una chimenea enmarcada con espejo, para que multiplique la luz, la sensación de espacio y tenga un aspecto ligero. Cuenta más secretos de este dormitorio el artífice de su decoración, el interiorista Raúl Martins. “El diseño oculta un armario con puertas en la zona superior, donde se esconde la televisión”.
Reflejado en el espejo vemos el impresionante cabecero entelado que ideó Raúl. Además, las paredes van enteladas en terciopelo gris, siempre buscando que el ambiente resulte elegante y a la vez muy cozy.
Por último, en función del estilo con el que quieras dotar al ambiente deberás apostar por una chimenea simplemente cerrada con el frente de cristal y un marco estrecho y poco vistoso, generalmente de hierro, ideal para habitaciones modernas, o si prefieres significar la pieza y envolverla en algún revestimiento e, incluso, acompañar todo de una embocadura que la haga protagonista del espacio. En este caso suele adecuarse con decoraciones rústicas, clásicas o incluso con el encanto Shabby Chic.
Emplear la embocadura de una chimenea para llenar de encanto el ambiente es una opción perfecta también aunque, en este caso, no nos servirá como fuente de calor. De todos modos, puedes colocar sobre ella velas o botellas con tiras de iluminación, para que ofrezcan una preciosa y romántica luz. En muy poco espacio contarás con un elemento decorativo de sumo valor para tu dormitorio.
En esta propuesta, Decora y Vende decide que la embocadura de la chimenea sea de estilo clásico, en contraste con la tendencia moderna del resto de elementos, como las esculturales mesitas de noche, las lámparas de bombilla a la vista o el papel pintado con sobrios motivos geométricos.