La empresa DJI presentó el Spark, un drone de tamaño compacto que apunta a los usuarios interesados en operar estos dispositivos por primera vez de forma sencilla. Además, su precio en comparación de otros modelos es menor. Saldrá al mercado a mediados de junio de este año.
El DJI Spark puede ser controlado desde un control remoto, desde un smartphone o por gestos, siendo el primer drone de la compañía capaz de funcionar única y exclusivamente mediante este tipo de operaciones. Para operar mediante gestos, DJI ha desarrollado el modo Gesture, gracias al cual basta mover las manos para indicar al drone qué debe hacer.
Gracias a su reducido peso (300 gramos) y tamaño, el Spark es capaz de alcanzar velocidades máximas de 50 kilómetros por hora con el modo Sport activo, una cifra que se aproxima a la registrada por drones como el Mavic Pro.
Para prevenir accidentes, el DJI Spark cuenta con el sistema FlightAutonomy que la compañía ya ha montado en algunos de sus principales drones. Este sistema está compuesto por una cámara principal, un sistema de posicionamiento visual orientado hacia abajo, un set de sensores 3D frontales, sistema de posicionamiento GPS y GLONASS, una unidad de medición inercial de alta precisión y una unidad de procesamiento formada por 24 núcleos. Este sistema permite al DJI Spark detectar obstáculos a una distancia de hasta 5 metros y realizar vuelos estacionarios de alta precisión a una altura máxima de 30 metros.
El Spark también cuenta con sistemas de protección autónoma que hacen regresar al drone al punto de despegue cuando la batería restante es insuficiente, la señal con el control remoto se ha perdido o, simplemente, el usuario presiona el botón de retorno al origen. Estas características ya estaban presentes en drones como el Mavic Pro, aunque en el Spark —un drone orientado a personas más inexpertas— cobra un mayor sentido.