El médico nutricionista de 81 años celebró su casamiento el domingo 08 de Diciembre en Villa Devoto con su esposa Estefanía Pasquini de 33 años: “Hace 40 años que no me quedaba hasta el final en un casamiento” comento el médico.
“Fue un día largo que se hizo corto”, afirmo Alberto Cormillot en otro medio. Luego de un año y medio juntos, él y ella, la licenciada en nutrición decidieron sellar su amor con un casamiento que organizaron con muchísima discreción.
Acompañados por amigos y familiares, Alberto y Estefanía realizaron la fiesta en Villa Devoto. “Empezó a las 11:30 y finalizó a las 19:30. Es la primera vez, en 40 años, que me quedo hasta el final en un casamiento”, afirmo el médico de 81 años.
“Tampoco es que bailé todo el tiempo, pero me la banqué bastante bien. En el momento ni siquiera noté si estaba cansado o no”, explicó quien destacó el concepto de “viejísimo” a partir de la diferencia de edad con su pareja, que tiene 33 años.
“Para mí fue una boda normal, celebramos el amor”, resaltó él y decide hacer oídos sordos a los comentarios sobre la diferencia de edad con su mujer, con quien no tuvo un prejuicio cuando decidieron comenzar la relación. “Uno no piensa en la cédula de identidad, se relaciona con la persona y punto”.
Cormillot, que a los 69 años empezó a bailar tap y a los 78 a realizar entrenamientos aéreos, remarca que no se deja “llevar” y no “permite” ese concepto del “viejísimo”. “Pienso así desde antes de comenzar esta relación”, aclaró quien eligió evitar leer comentarios en las redes sociales sobre su vida. “Si agarro un billete de 100 pesos y lo arrugo, no deja de ser un billete de 100 pesos”, ejemplificó.
“Nunca faltan las personas que dicen ‘ella lo quiere por plata’, ‘él es un viejo verde’. Ella no es de los medios, y por más que yo trabaje hace 50 años y tenga más experiencia, sabemos que hay cosas que nos hacen pelota”, afirmó Cormillot.
Recién casados, Alberto y Estefanía retoman sus actividades laborales esta semana y será así durante enero, y en febrero se tomarán unos días y celebrar su luna de miel. Según contó, el destino elegido por la pareja será “del Ecuador para abajo” porque quieren disfrutar del calor en una playa.
También habló de la posibilidad de tener un hijo juntos y aclaró que, aunque hubo versiones que así lo indicaron, no será a través de un tratamiento sino de manera natural. “Si viene será bienvenido. Eso sí, debería ser cuanto antes…”, resaltó.