¿Sabías que la forma en la que te lavas el pelo influye (y mucho) en lo sano que lo notas? Resulta que, por ejemplo, si lo limpias las veces adecuadas, lo cepillas antes de meterte en la ducha y no escatimas en el tiempo que pasas masajeando los productos sobre el cuero cabelludo, según los expertos puedes frenar la caída, consejos que te interesa leer a pocas semanas de que llegue la primavera. Por otra parte, si lo que realmente te preocupan son las puntas abiertas y no importa lo bien que apliques la mascarilla, sigues sin conseguir que no se te parta el pelo, la forma en la que repartes el champú también podría ser el error que boicotea tu plan de lucir pelazo. Descubre cómo transformar la forma en la que lavas tus mechones a mejor, ahorrar tiempo y, de paso, evitar la deshidratación que estropea la zona de las puntas.
El primer paso antes de meterte en la ducha es cepillarte el pelo. Un gesto en el que los expertos insisten por lo mucho que ayuda a mantener una melena saludanble y lo común que es olvidarlo: “Esto garantiza un desenredado seguro y sin rotura. El cabello húmedo es más débil y causarás más daño. Además, así la aplicación del champú será más eficaz y mucho más agradable“, asegura Caroline Greyl, presidenta de Leonor Greyl, quien también recuerda la importancia de lavar los accesorios que utilices para hacerlo. “Limpia peines y cepillos con regularidad. La suciedad que se acumula en ellos daña el cabello y le resta brillo. Hay que limpiar los cepillos una vez a la semana retirando con un peine los cabellos que puedan quedar en el cepillo”, aconseja la experta, además de recomendar el Cepillo de Cerdas de Jabalí de su marca porque fue “creado para desenredar suavemente y prevenir la rotura. Además estimula la circulación, la oxigenación y ayuda a eliminar la suciedad y la acumulación de producto”.
Otro detalle fundamental para evitar la rotura consiste en tratar la melena por partes y recordar que, cuanto más largo es el pelo, más propenso será a que se abran los finales: “Las fórmulas deben ser suaves para no agredirlo y debemos tener en cuenta que podemos encontrarnos en una sola melena dos características distintas, unas puntas secas y una raíz grasa. Eso se produce porque la grasa aporta humedad al cabello, pero cuando es tan largo no llega hasta las puntas”, razona Felicitas Ordás, directora de Felicitas Hair. Como solución, la peluquera señala que “existen productos que lavan y acondicionan según estas características, aunque las puntas, para que no se estropeen deben estar siempre hidratadas, por lo que recomiendo utilizar tras cada lavado un sellador de puntas, acondicionador y mascarilla mínimo cada quince días”.
Sí, puede que la forma en la que usabas tu champú hasta ahora estuviera estropeándote el pelo, al menos si lo masajeabas de de raíces a puntas: “No es necesario aplicar champú ni frotar el resto de la melena, con el champú que cae sobre medios y puntas desde la raíz es más que suficiente. El champú sólo debe aplicarse en el cuero cabelludo y la espuma generada en la raíz se deslizará naturalmente por todo el cabello durante el aclarado para purificarlo sin dañarlo”, revela Caroline Greyl. Como consejo extra, la presidenta de Leonor Greyl añade que “si te gusta lavarte el pelo a diario o cada dos días, haz una sola aplicación de champú y aclara a fondo. ¡No necesitas más! Si se espacian más los lavados, recomendamos dos aplicaciones sucesivas de champú”.